Crecimiento cristalomórfico
Busco, hurgo, escarbo, dentro de mi, hondo, más hondo, más hondo aún, pareceira que no tuviera fondo. Recavo, junto, limpio, tamizo, briznas de recuerdo y sentimiento, astillas de inteligencia y determinación, motas de valor y coherencia; apenas minúsculas estructuras cristalomórficamente perfectas de humanidad.
Sigo clavando las uñas, ya desgasté las herramientas, ya sólo me quedan las manos para seguir extrayendo, una y otra vez, y otra, y otra, sin descanso...
Me detengo.
Estoy exhausto.
El aire está corrupto, el cansancio aumenta y la entrada a la improvisada mina ya queda muy lejos, demasiado arriba. Mi minúsculo tesoro cabe en uno de mis bolsillos, en el más pequeño, pero es valioso, muy valioso.
La velocidad de crecimiento cristalomórfico de una estructura aumenta de forma exponencial ante la presencia de núcleos, apenas minúsculas estructuras cristalomórficamente perfectas, que sirvan de modelo a imitar y de primer cristal en el crecimiento.
Es sencillo, muy sencillo. Sonrío.
Ahora me dejo llevar. Escucho. Observo. Sé que tendré que dar lo mejor de mi. Sé que esta vez mi juez será exigente, le conozco, me conoce, no es de fiar. Tendré que rendir cuentas ante mi mismo. Pero sonrío. Es cuestión de tiempo y cada vez menos; exponencialmente menos.
Sigo clavando las uñas, ya desgasté las herramientas, ya sólo me quedan las manos para seguir extrayendo, una y otra vez, y otra, y otra, sin descanso...
Me detengo.
Estoy exhausto.
El aire está corrupto, el cansancio aumenta y la entrada a la improvisada mina ya queda muy lejos, demasiado arriba. Mi minúsculo tesoro cabe en uno de mis bolsillos, en el más pequeño, pero es valioso, muy valioso.
La velocidad de crecimiento cristalomórfico de una estructura aumenta de forma exponencial ante la presencia de núcleos, apenas minúsculas estructuras cristalomórficamente perfectas, que sirvan de modelo a imitar y de primer cristal en el crecimiento.
Es sencillo, muy sencillo. Sonrío.
Ahora me dejo llevar. Escucho. Observo. Sé que tendré que dar lo mejor de mi. Sé que esta vez mi juez será exigente, le conozco, me conoce, no es de fiar. Tendré que rendir cuentas ante mi mismo. Pero sonrío. Es cuestión de tiempo y cada vez menos; exponencialmente menos.
...sólo espero que no me dejes sin saber el desenlace.
ResponderEliminarTodo un acto de valentía.
Si señor.
Creo que nosotros tenemos la formula y la peor critica puede nacer de nosotros.
ResponderEliminarBesos
Yo tengo que aprender a escuchar y observar....
ResponderEliminarSaludos Vizconde!
Nadaq, tú que siempre has sabido leer entre líneas no tendrás problemas para conocer el desenlace.
ResponderEliminarAmets, hace tiempo ya que dejé de buscar fórmulas precisamente porque no era capaz de dar con una que me satisficiera por completo. Besos.
Saludos Alberto. En realidad supongo que ésa es una asignatura pendiente de todos que nunca terminamos de aprobar.
Tas txapita cofla... lo q cazo de este último mensaje tuyo es : m'aburro, interacción-in, aire viciado = salí a pasear, mina = minita. Es bien, pero menos impersonal es mejor, soltate y felicitations, H
ResponderEliminarYo también te quiero pibe...
ResponderEliminarBesos, nos leemos