Ayer también llovió (y II)

-¿Se puede saber cuánto tiempo llevas así?
-Me encanta observarte desnuda cuando te quedas plácidamente dormida después de hacer el amor.
-So, you're staring at me. Sure you wanna flirt with me.
-Sí Basíleia, me vuelvo loco por flirtear contigo.

No podía ser. Nada en aquel extraño le recordaba a él. ¡Dios mío! Era capaz de recordar las conversaciones como si las acabase de tener y habían pasado cinco años. Necesitaba pensar con la cabeza fría y no lo conseguía. Posición segura, posición segura. Un enroque sería lo más apropiado y seguro.

-No Basíleia, no puedes enrocar.
-Es que estoy hasta las narices de que me comas las torres. ¿Cómo que no puedo enrocarme? No acabas de decir que le enroque es casi siempre una buena opción para jugar con las torres, que es un jugada defensiva y ofensiva a la vez...
-Sí, pero también es muy peligrosa porque encierras al rey. Y, sobre todo, no está permitido si te están dado jaque.

Un enroque. Saldría por la puerta en dirección contraria e inmediatamente pondría en marcha la maquinaria necesaria para averiguar quién era ese personaje. Podía hacerlo, tenía los medios adecuados. Pero y si existía la más mínima posibilidad de... No, no era posible después de...

-Sabes lo que estás sacrificando.
-No creo que sea plenamente consciente de ello Basíle..
-No me llames así. Y no es una pregunta. Es una afirmación.
-Por favor trata...
-No quiero tener que recibir una carta con la notificación de tu muerte, ¿sabes? No quiero ser la viuda que llora por un utópico héroe que invierte en quimeras. Prefiero dejar de verte aquí y ahora.

Se dirigió con paso decidido hacia la salida, asió firmemente el picaporte decida a ejecutar el primer movimiento de su enroque.

-¿Sabes Basíleia? Sé que ahora no me entiendes, pero algún día me comprenderás. Algún día me comprenderás y me volverás a ver, aunque para eso tengas que aprender a confiar en extraños.

No podía ser. Era completamente imposible que aquellas palabras pronunciadas hacía más de cinco años (cinco años, seis meses, dos días y probablemente unas tres horas y media) tan lejos de ahí justificaran aquello.

-¿Es que realmente crees que es posible?¿No te das cuenta que resulta absurdo?
-¿Cuántas veces te he dicho Basíleia que deberías leer a Conan Doyle?
-Déjate en paz de tonterías y de Sherlock Holmes. Esto es serio.
-Pues claro que es serio. Y lo que te estoy diciendo también. "Cuando todas las demás explicaciones se demuestran imposibles la que queda, por absurda e improbable que pueda parecer, tiene que ser la verdadera". Confía en mi. No he empeñado casi cuatro años de mi vida en balde.

Maldito Conan Doyle. Aprender a confiar en extraños.

-Muy bien. Pues aquí estoy.
-Perdone el abordaje de antes y lo irrespetuoso que resulté. Hasta ahora he estado siguiendo instrucciones estrictas en mi comportamiento.
-Ya. Creo que entiendo lo que quiere decir, y creo que de otra forma no estaría sentada aquí ahora. De lo que no estoy muy segura es de si realmente quiero oír lo que me va a decir.
-Pues me temo que en realidad no tengo nada que decirle. Todo lo que tengo es este sobre para usted. Discúlpeme de nuevo por la descortesía pero debo irme.

No fue capaz de articular ninguna palabra desde el mismo momento en que el extraño se levantó de la mesa. Tampoco supo muy bien cómo reaccionar cuando vio la fotografía.

Muy bien, sigamos jugando. De nuevo dos opciones:

-En la foto se ve al misterioso amante con un periódico del día anterior y en realidad es una prueba de vida de sus malvados captores.

-En la foto se ve al misterioso amante sonriendo y leyendo el periódico del día anterior para, como explica en la carta que acompaña a la foto, demostrarle que sigue vivo por improbable que pueda resultar.


Comentarios

  1. Me quedo con la segunda, se hace más interesante saber el porque de su improbable existencia y su sonrisa.

    En la primera opción ya tenemos una explicación, esos malvados captores que lo retienen. Asi que, descartada por explicada.

    Intrigada y expectante por la tercera entrega....Bea

    ResponderEliminar
  2. ...definitivamente, la primera no.

    No me gustan las complicaciones que podrían brindar los captores. Que a la vez quitarían protagonismo a lo que de verdad me interesa.

    La segunda.

    ResponderEliminar
  3. La segunda.Voté en la anterior pero no salió.....en fin.SALUD¡¡¡.

    ResponderEliminar
  4. Muy bien, ya hemos votado tres de los cinco habituales. Así que por mayoría aplastante gana la segunda opción.

    Muchas gracias a todos por participar espero que os siga gustando.

    Etinarcadia, no llegó el comentario del post anterior. De todas formas creo que hubiera ganado igualmente la opción primera.

    Ale, a escribir, a ver si me da tiempo a tenerlo listo hoy.

    Besos, abrazos y ...que no falte.

    ResponderEliminar
  5. Eiiii.. Que falto yo, que falto yoooo....!! Pero también prefiero la seguda opción. Además, hay una carta, y eso amplía el campo de posibilidades a la hora de desarrollar y hacer más compleja la historia. Que, por cierto, está interesantísima... Me encantan las de intriga.

    Besos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Ideas al viento, brindis al Sol y demás...

Entradas populares de este blog

Segunda acepción

BORDADO CON PUNTA FINA COMO LOS PELOS DEL PECHO

Cálida Salamanca