DICOTOMÍA

No me digas lo que no quiero decir.
Tu aliento, cálido, cercano.
No me escuches lo que no quiero escuchar.
Tu abrazo, sincero, a mano.
No me hagas escuchar lo que quieres que diga.
Tu consejo, susurrado, en mi oído.
No me hagas decir lo que quieres que escuche.
Tu nuestro siempre conmigo dentro.
No digas, no escucharé. No escuches, no diré.
Tú nunca fuera de mi nuestro
El camino se hace andando, sí.
Conmigo nunca sin ti.
¡Que jodido este puto desierto!
Sin ti nunca conmigo.

Comentarios

  1. ...hermoso, vizconde.

    Me evitaste el trabajo de intentar leer entre líneas.

    ...aunque quizás no del todo.

    ...vuelvo a leerlo.

    ResponderEliminar
  2. Gracias, para mi sólo medio hermoso pero, ¿puede haber yin sin yang?

    ResponderEliminar
  3. ola niño!!!!

    aunq no firmo q sepas q entro siempre a ver q t cuentas d nuevo xq como t dije todas estas palabras son totalmente tu y no podrian ser d otro.m qedo con l post anterior q lleva un poco de mi alejandro y un muxo de mi nueva vision pesimista de la vida xo algo dentro d mi me dice q si la vida s eso,q hacemos aki?????tiene q haber algo mas y se q tu y yo lucharemos xa encontrarlo xq lo merecemos o al menos tu lo mereces.
    espero q haya sido un comentario digno d ti
    bsazos feo

    ResponderEliminar
  4. Hola guapa, de sobra sabes que cualquier aportación tuya no solo es digna sino muy bien recibida porque se hace y se recibe con cariño.
    Por lo demás ¿qué quieres que te cuente que tú no sepas? Pues eso que no es lo mismo ser que estar.
    Muchas gracias por estar ahí y escribir de vez en cuando.

    Un beso fuerte.

    P.D.:"Fight forever till the end because never forget so must go on"

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Ideas al viento, brindis al Sol y demás...

Entradas populares de este blog

Segunda acepción

BORDADO CON PUNTA FINA COMO LOS PELOS DEL PECHO

Ayer tambén llovió (y III)